En dermatología pediátrica, la correcta elección de la dosis de principio activo, así como del excipiente, se vuelve fundamental para conseguir los resultados terapéuticos deseados,
por lo que se deben tener en cuenta aspectos tan variados como las características de la lesión, las del paciente y las del medicamento seleccionado. En la población pediátrica se
plantean dificultades añadidas, tales como la limitada variedad de especialidades comerciales que se ajusten a sus particularidades.
Por ello, la formulación magistral o formulación de medicamentos individualizados supone una buena alternativa terapéutica que permite emplear principios activos en los rangos terapéuticos aceptados, vehiculizados en las formas farmacéuticas idóneas, asociar varios en un mismo medicamento e incluso adaptar el vehículo al estado de la lesión, así como a las necesidades intrínsecas del paciente. Las formulaciones recogidas en este artículo, se basan en una amplia experiencia clínica y permiten a los médicos prescriptores adaptar el tratamiento de forma personalizada.